Quizás pensarás que no es nada impresionante, pero para todo padre y madre son momentos inciertos y cambiantes.
En tu primera semana fuiste un niño muy gritón y llorón. Era de esperarse te han sacado de lo que era tu lugar más cómodo y el único que habías conocido, la barriga de tu mama donde flotabas y crecias sin molestias, ahora no sabes ni donde estás, sintiendo frío, calor, dolor, incomodidad, miedo, hambre, sueño, sorpresa, alegría cada una de estas cosas todas por primera vez. Estas cosas que tu sientes solo las puedes dejar saber de una sola manera, llorando. Ya nos dijeron que estas cosas te van a pasar, pero no sabemos a qué hora del día te va a pasar. Debemos observar y aprender a diferenciar tus quejidos, sonidos, movimientos, respiración para descifrar qué te sucede y poder ayudarte. Estamos llenos de miedo mas yo que tu padre sabes que el todo lo lleva más calmado y controlado. Pero yo tengo esa sensación de que está en un juego de video y te matan en la primera tabla. De no poder ser buenos padres.
Te toca baño pues sabes que tengo terror de que te resbales de mis manos y te golpes al caer, asi que papa toma el mando y es el primero en bañarte, no te miento parece que ha bañado muchos bebés recién nacidos en su vida.
Para alimentarte elegimos que fueses lactado, pero en la teoría es más fácil que en la práctica. Te acomodo la teta y tu la empujas, la rechazar, no la quieres. Repito la ecuación según lo que aprendí y vuelves no la quieres. Siento tristeza y frustración porque estoy consciente que es lo mejor para ti, pero simplemente no está sucediendo. ya estás desesperado y debemos alimentarte, seguimos con el intento de pegarte en la teta sin éxito. Abuela ha llegado con formula para ti (sin comentarios) pero dentro de la situación accedemos a que la tomes para que comas algo. Mientras papá te alimenta yo extraigo leche materna con la máquina. para que mis tetas no duelan tanto, mantenerlas produciendo leche y tengas que beber más tarde. Durante tu primer mes de tu alimentación fue combinada leche materna y fórmula. En tu segundo mes me llene de paciencia y perseverancia y básicamente te obligo a tomar teta hasta que te acostumbraras. Lloraste, lloraste y lloraste así fue tu inicio de la experiencia con la lactancia.
Debido a este cambio llegaron los cólicos (dolores de estómago producidos por gases) pero no teníamos idea de que ese cambio provocaría eso. Probamos muchos productos para aliviar los dolores, funcionaban un ratito y luego hola cólicos. Tu diminuto estómago ya se adapta al cambio e ibas mejorando tus dolores.
Te levantabas cada 2 horas fielmente. No era molesto por que cuando despiertas sabíamos que era para comer, eso si ya lo habíamos desifrado. Poco a poco llorabas menos.
Han sido unas semanas fuertes pero hermosas porque te hemos conocido y has estado muy cerquita de nosotros, no te queremos soltar.
Te amamos con todas nuestras fuerzas.
Nene lindo, nene hermoso, nene TU !!!!